(2 porciones)
Filete de salmón con piel | 360 | gr |
Aceite de olivas | 2 | cucharadas |
Espinacas blanqueadas | 100 | gr |
Pasta de tomate | 300 | ml |
Crema de leche | 2 | cucharadas |
Vino blanco | ||
Sal y pimienta |
Para blanquear las espinacas, hervir un poco de agua en un perol, agregar las hojas lavadas y dejar al fuego por 3 minutos.
Escurrirlas y sumergirlas en agua fría con hielo.
Cortar el salmón en 2 porciones y rociarles sal por todos los lados.
En una sartén antiadherente, calentar el aceite a fuego alto y poner los filetes en el aceite caliente por el lado contrario a
la piel y sellar por 30 segundos. Voltearlos y cocinar por el lado de la piel hasta que esta se ponga dura y crocante. Bajarlos
del fuego y llevarlos al horno 4 minutos a 180°C ó 350°F. El salmón debe quedar término medio,
rosado en el centro para que no quede seco. Si no tiene horno, dejar a fuego bajo de 4 a 6 minutos en la misma sartén.
En otra sartén, poner al fuego la pasta de tomate, una cucharadita de azúcar, revolver y agregar la crema de leche
revolviendo siempre. Es posible que ésta se corte un poco; de ser así, agregar una cucharadita de mantequilla y
revolver con firmeza. Agregar el vino y salpimentar para echar las hojas de espinaca. Dejar al fuego por 4 minutos sin que hierva
(bajar el fuego si es necesario).
Para servir, poner en el plato una cama de espinaca con la salsa y encima el filete de salmón con la piel hacia arriba.
Rociar esta con unas gotas de limón y sal gruesa.
Gloria Bernal - Catering